Detenido por robo de joyas

19 de marzo de 2014

                                                                                                                    Número: 1923

Personal de la Policía Ministerial del Estado, llevaron a cabo la detención de quien dijo llamarse Enrique Romero Santos de 38 años originario de Tlajomulco de Zúñiga en el Estado de  Jalisco, toda vez que está señalado como probable responsable el delito de robo en contra de la empresa Orfebres Saldaña, originaria de Guadalajara y dedicada a la compra y venta de oro.

 

La detención de Enrique, tuvo verificativo en la Avenida Mahatma Gandhi, cuando personal de la Policía Ministerial lo buscaba, toda vez que había sido presentado días antes para que rindiera su declaración con relaciona al robo y cuyos hechos  tendrían verificativo el pasado 10 de enero del año en curso; la ubicación del señalado en las averiguaciones se registró en el municipio de Ameca, Jalisco, toda vez que las autoridades de Aguascalientes habían emitido un convenio de colaboración con la Procuraduría General de Justicia del Estado de Jalisco, para la búsqueda, captura y presentación del hoy detenido, toda vez que estaba señalado como autor material del ilícito, así como hacer entrega de joyería varia, producto del hurto.

 

Dentro de su declaración que rindiera ante el AMP, Enrique Romero Santos, señaló que el trabajaba para un señor como chofer, donde visitaban varios estados del país, en la compra  y venta de oro, así como en la recolección del dinero producto de la venta del mismo; por lo que el día 10 de enero del año en curso, arribaron a esta ciudad, donde se hospedaron en un hotel que esta ubicado en la Avenida José María Chávez, donde su patrón le indicó que  se metería a bañar, mientras  el aprovechara para lavar el auto, siendo este un Volkswagen, tipo Jetta, con placas de circulación del Estado de Jalisco.

 

Como sabía que en la cajuela guardaban el dinero y las joyas, decidió apoderarse de un maletín conde estaba el dinero, así como de una bolsa de color negro donde se guardaban las pieza de oro, dejando abierta la cajuela y hacer pensar que lo habían secuestrado, retirándose a boro de un auto hacia el sur de la ciudad, donde descendió en el cruce de  José María Chávez y Siglo XXI, comenzando a caminar hasta llegar al final de la Avenida Mahatma Gandhi y en un baldío enterrar el  botín, para retirarse y dirigirse a un hotel, donde permaneció dos días, decidiendo comprar una mochila y regresar por las joyas las cuales cargaba con el, mientra que el dinero lo mantuvo enterrado en ese mismo lugar.

 

Posteriormente Enrique  compró una bicicleta, con al cual decidió dirigirse a la ciudad de Encarnación de Díaz Jalisco pero al llegar a la puerta sur, decidió  abandonar la unidad, y seguir caminado por el cerro hasta llegar  al vecino municipio, donde permaneció por espacio de dos días y de ahí seguir su trayecto a varias ciudades de lo Altos de Jalisco, para llegar un mes después a la ciudad de Guadalajara, donde el día que cometió el robo se comunicaba con sus familiares y les hacia creer que estaba secuestrado.   

 

Ya en  la Perla Tapatía, Enrique se estableció en una casa abandonada, donde guardó las joyas, agarrando algunas para  ofrecerlas a diferentes personas, obteniendo $12,000.00 pesos, los cuales se gastó en artículos personales,  hasta que fue detenido por las autoridades ministeriales y devuelto a esta ciudad donde se le señalaba en una averiguación previa por robo.

 

Posterior  a rendir su declaración ante el AMP, Enrique obtuvo su libertad por lo que se retiró del edificio de Averiguaciones Previas, un día después, se presentaba el afectado, para señalar que las joyas recuperadas eran solo parte de lo que originalmente había robado, por lo que de nueva cuenta el AMP, solicitó que se ubicara a Enrique y ampliar su declaración con relación al restante de las joyas.

 

Por su parte los Agentes Ministerial, se dedicaron a  la ubicación del solicitado en la averiguación, ubicándolo cuando caminaba sobre la Avenida Mahatma Gandhi, por lo que se le marcó el alto, y previa identificación, como agentes investigadores, Enrique, trató de darse  a la fuga por lo que en determinado momento, daño un reloj de pulso propiedad de uno de los agentes ministeriales, así como ocasionarle algunos daños a su extremidad superior (brazo).

 

Inmediatamente, los agentes lograron neutralizar a Enrique y subirlo a la unidad policial, y ponerlo a disposición del AMP., donde rindió su declaración con relación al incidente, así como señalar que efectivamente, faltaban varias piezas de  oro, ya que las había vendido en la ciudad de Guadalajara Jalisco. Finalmente el AMP, solicitó fuera enviado al penal Enrique Romero Santos, donde permanecerá hasta la resolución del Juzgado Penal.